Gracias y aqui va
Soy un monstruo
soy un monstruo, todos me lo dicen, dicen que soy verde y feo, que habito en una cueva de la que no me muevo, que soy una bestia sin sentimientos, que da igual cuanto luche por quitarme el titulo, dicen que ya mate muchas ovejas, que ya destruí muchas vidas de muchos granjeros que tenían forjada una vida de sudor, y sangre de vaca y cordero y leche de cabra. Ellos no lo entienden, tengo que hacerlo, soy un monstruo y todos me lo dicen ellos me repiten que soy verde y feo y que habito en una cueva de la que no me muevo, dicen que soy un animal que destruye casas por las noches, que tengo un disfraz de hombre perfecto del que las doncellas se enamoran para volver luego a sus casas a contar a sus familias que las secuestré en el lugar de abrazarlas o que las violé en el lugar de besarlas, todas dicen eso, todas conspiran porque soy un monstruo y no lo puedo evitar, y lo usan, y lo dicen mientras vuelven llorando a los brazos de sus madres porque soy un monstruo y todos me lo dicen… y ellas también.. y dicen que soy verde y malo.
Merezco la muerte quizás. Solo por ser un monstruo merezco morir pero al menos querría me matasen por los motivos… por las razones por las que actuaba de forma monstruosa; ya que soy un mostruo y hago cosas de monstruo; tal y como debe ser. En algún lugar estoy en mi derecho a destruir mientras viva pero ellos también lo están a matarme mientras puedan.
Confieso a quien le importe que ahora busco minutos durante la noche para ver a una chica más, en secreto; a alguien que no sabe a lo que se enfrenta y sin embargo, lo sabe. Y esta persona fue advertida y no parece responder. Y la amo como no antes a nadie y aun admito así a alguien alguna vez haber amado.
Ella volverá llorando un día, estoy seguro. No lo podré evitar. Soy solo un monstruo, soy uno mas y como todo el resto de bestias debemos destruir y asesinar y aterrorizar y hacer llorar. Soy un egoísta y debería desaparecer antes de hacer doler; pero ya intente y es inútil, aun así soy un monstruo, aun así hago daño.
Por todos es sabido que es fácil adquirir la felicidad, estamos hechos para vivir breves momentos felices, instantes en los que olvidamos por segundos que hay cientos de cosas que romperían el castillo de cristal con la facilidad con que se rompe generalmente un cristal. Pero lo que duele no es la caída de la ultima torre, ni la reconstrucción de un castillo fino y débil cuyo final es evidente y cuya caída es inminente. No… lo realmente doloroso es ver resquebrajarse la fortaleza desde las escaleras de la mas alta torre flotante en el espacio, el dolor esta en ver caer primero las puertas y ventanas y que lentamente avancen las brechas y el ruido vidrioso de los muros y el llanto de la princesa y observar como, nunca, por mucho que caiga, llegara al suelo puesto que nunca construimos el punto mas bajo: solo queríamos ser felices; no nos imaginábamos cayendo en el infinito.
